Imaginaos principios de 1930 en Estados Unidos: atmósfera de jazz, coches de grandes guardabarros con ruedas blancas y radiadores plateados; hombres en traje con sombrero y mujeres ataviadas con largos vestidos entallados, donde las películas eran en blanco y negro sonoras, a pesar de que se atisbaba ya algo del color. Esto es si nos fijamos en la parte idealizada y positiva, pero no hay que olvidar que en esa época el país seguía afectado por la crisis del 29 y la amenaza de la inminente Segunda Guerra Mundial. En este ambiente vamos a contar lo referente a la factoría Disney entre los años 1931 y 1940.
En 1932 el cineasta y empresario ganó su primer Oscar y en diciembre del 33 nació su hija Diane Marie. Además, en este periodo el ratón Mickey se convirtió en un auténtico fenómeno de masas. El dinero que ganaba su creador compensaba lo que no ganaba en la taquilla. De 1931 a 1935, el estudio produjo cincuenta y dos cortometrajes. Disney tuvo que negociar con United Artists, a principios de la década, para tener un uso exclusivo del technicolor, ya que Universal rehusó de aportar 15.000 dólares como adelanto del rodaje de cada corto. Estos cortometrajes seguían teniendo como inspiración los cuentos y novelas populares, solo que esta vez no son sinfonías, sino Mickey y sus amigos, como Goofy, Donald y Pluto. Estaban también otros personajes, además de Clarabella y Horacio; como Peter y Patricia Pigg, la perrita de Minnie llamada Fifi y Clara la gallina cantante de ópera.
Durante todo este periodo se realizaron numerosos cortometrajes sobre cuentos y fábulas en technicolor. Algunas de ellas son: El patito feo (The Ugly Duckling, 1931), El taller de Santa Claus (Santa's Workshop, 1932), La cigarra y las hormigas (The Grasshopper and the Ants, 1934) o Conejete y Tortuguita (The Tortoise and the Hare, 1935).
Quizá la obra de estos primeros cinco años de la década que más repercusión tuvo fue Los tres cerditos (The Three Little Pigs, 1933), que se la consideró una parábola para combatir la crisis económica. De ahí que su canción ¿Quién teme al lobo feroz? se convirtiera en una especie de himno. Esta película de Fred Moore recibió un Oscar, lo que fue motivo para hacer una serie de tres capítulos.
Con el paso de los años, a partir de la segunda mitad de los treinta, Mickey fue perdiendo un poco el protagonismo, compartiéndolo más con sus compañeros. Además cambió su fisionomía, sus rasgos se hicieron más redondeados y perdió su cola. Se siguieron uniendo nuevos personajes como Mortimer, el ratón admirador (quizá un poco acosador) de Minnie; y Daisy, conocida como Donna Duck en 1937. A esta última se le considera la primera feminista de los dibujos animados. Los sobrinos de Donald, Jaimito, Juanito y Jorgito los crearon en 1938 y Butch, el bulldog enemigo de Pluto, vio la luz en 1939.
Blancanieves y los siete enanitos (Snow White and the Seven Dwarfs) se estrenó en 1937, pero Walt Disney estaba detrás de ella desde 1934. La película dirigida por David Hand, contó con un presupuesto inicial de medio millón de dólares, toda una fortuna para la época. United Artist se negó a financiar tal cifra, con lo que Disney tuvo que firmar un contrato de distribución exclusiva de sus cortos con RKO. La película está hecha con rotoscopia (la captura de movimiento para los dibujos animados) y se rodó con una cámara nueva, llamada Multiplane, que era capaz de crear profundidad de campo. Blancanieves fue la película más taquillera de la historia hasta Lo que el viento se llevó (Gone With the Wind, 1939). La película además, fue nominada a un Oscar por mejor banda sonora original.
En 1940, con el tirón de Blancanieves y con su nuevo estudio situado en la avenida Buena Vista de Burbank, se estrenaron Pinocho y Fantasía. Las dos de una calidad técnica mejorada a la de Blancanieves y las dos fueron un fracaso comercial por el inicio de la II Guerra Mundial. Pinocho ganó dos Oscar, uno por mejor canción y otro por mejor banda sonora original. Fantasía, por su parte, incorporó sonido estereofónico Fantasound.
Para finalizar, en estos años el estudio contaba ya con mil empleados y Ub Iwerks, el ex-socio y amigo de Walt, regresó a su lado. Debido a los problemas financieros, los hermanos Disney se vieron obligados a vender 600.000 acciones a cinco dólares cada una. En los siguientes años, se produjeron huelgas en el estudio. Disney respondió a esta situación intentando llegar al público latino, así que se marchó con su equipo. Dumbo y Bambi se estrenaron en las salas. Esto lo explicaremos con más detalle en la siguiente entrada.
Toda la información sacada pertenece al libro "Walt Disney 100 años de magia" publicado por El País Aguilar en 2001.
(Imágenes con derechos de autor (Disney)
No hay comentarios:
Publicar un comentario